viernes, 31 de enero de 2014

¿Proyectos importantes sin Dios?


Se nos fue el mes de Enero, y parece imposible! Para los que nos pasamos los días muy ocupados, la sensación es peor y casi siempre pensamos en lo corta que es la vida.

¡Muchos hemos iniciado el 2014 con nuevas energías, esperanzas y proyectos! Vemos hacia atrás y con un mes menos ahora, debemos preguntarnos cuales han sido nuestros avances en esos proyectos. No basta con soñar con un mejor futuro, debemos trabajar y no perder el entusiasmo. Sin embargo, además de la fijación de metas, elaboración de planes y obtención de recursos para ver realizados nuestros proyectos, es necesario acompañarnos de quien todo puede. Antes solía pensar en que yo era quien haría posible lo que me proponía. Ahora mi vida es diferente. El Señor me ha permitido con su gracia, poner en sus manos mis proyectos, y entregar mi jornada diaria a El, para que disponga lo que más me conviene. ¡Y vaya como ha cambiado mi vida! 

Te invito en esta noche de agonía de Enero, a replantear tu estrategia para el logro de tus propósitos. ¿Qué estás ofreciendo al Señor? ¿Confías en su divina providencia? ¿Entregas a El tus planes, sueños, preocupaciones y jornadas diarias? Posiblemente muchas veces estamos dejando de lado al mejor compañero de camino, y socio perfecto de empresas. ¡No olvidemos que con Dios, podemos ser invencibles! Pero tampoco cometas el error de pensar que el trabajo que tú debes hacer, Dios lo hará por tí. Somos forjadores de nuestra vida, y cosecharemos de acuerdo al trabajo realizado.


Fotografía de Irina Orellana, Enero 2014.